Nuestro compromiso Made in France
En La Bonne Brosse, tenemos una convicción: el cepillo para el cabello merece ser tratado como un objeto cotidiano, noble y valioso. Debe reflejar el cuidado que nos damos a nosotros mismos y a nuestro planeta. Para ofrecerle los mejores cepillos, hemos decidido asumir el desafío del Made in France. Pero entonces, ¿por qué fabricar cepillos para el cabello franceses?
Nacida entre los valles del Jura y del Oise, la industria francesa de los cepillos de pelo de lujo satisfizo inicialmente las necesidades y los deseos de las cortes reales europeas.Esta industria floreció hasta principios del siglo XX, antes de ser parcialmente sustituida por la llegada de la producción asiática, principalmente a partir de plásticos petroquímicos, con precios mucho más atractivos…
Dado que en Francia aún existen algunas empresas artesanales de fabricación de cepillos que perpetúan esta tradición francesa del cepillado, hemos querido revivir este saber hacer único y contribuir a revitalizar la industria.
Hemos elegido una empresa que conoce mejor que nadie el cabello y la importancia de un cepillado de calidad y que, como empresa del Patrimonio Vivo Francés, se mantiene fiel a las técnicas artesanales tradicionales que han hecho tan excelentes los cepillos de pelo franceses.
Todos nuestros productos se fabrican íntegramente en Francia y se abastecen localmente, respetando el saber hacer tradicional y una ética sostenible.
Nos comprometemos a ofrecer cepillos de pelo diseñados sin ningún tipo de plástico, utilizando únicamente materiales responsables, respetuosos con el medio ambiente y de alta calidad.
Nuestros mangos están fabricados con acetato de celulosa 100 % biodegradable, un material natural derivado de flores de algodón y perlas de madera.Resistente, duradera e hipoalergénico, su uso es adecuado para todo tipo de pieles y usos, a la vez que combina rendimiento y respeto por el medio ambiente.
Con socios y artesanos cercanos a nosotros, que comparten nuestra visión del cepillo para el pelo como producto de calidad.
También garantizamos el origen, la seguridad y la calidad artesanal de cada uno de nuestros cepillos, gracias a un proceso de fabricación 100 % transparente y ecorresponsable.
Porque la inmensa mayoría del mercado internacional de cepillos para el pelo está en manos con demasiada frecuencia de fábricas cuyas condiciones, tanto humanas como medioambientales, son catastróficas, y porque un producto tan importante para nuestra belleza y bienestar merece ser producido y diseñado con el máximo cuidado.